José Tomás, la prensa y la TV.

Si hoy en día hay un torero que se permita el lujo de torear donde quiera, cuando quiera y como quiera, ese es José Tomás.

Es especular sobre la aparición del de Galapagar y se revoluciona el gallinero taurino de la ciudad en cuestión. Qué digo de la ciudad, de toda España.

En este caso suena para la corrida de la prensa en Las Ventas, allá por el aún lejano junio. ¿Será verdad? El tiempo lo dirá. Lo que está claro es que en ese caso, y aprovechando la gestión de su amigo Simón Casas, el maestro volvería al coso venteño tras 9 años de ausencia. Demasiado tiempo para la plaza más importante del mundo. Para la Catedral del toreo.

De todos es sabido que el canon ofertado por el autodenominado productor es astronómico, de eso ya se ha hablado mucho, y la mejor y más rápida forma de recuperarlo es anunciar al maestro. Así cuadrarían las cuentas.

La reaparición, de confirmarse, sería fuera de feria y sin TV. Lo de fuera de feria no me molesta, incluso veo positivo sacar la de la prensa fuera de abono para que recupere el protagonismo perdido, pero sí lo de sin TV. Si no hacemos más que decir que lo que no sale en TV no existe, ¿por qué oculatse?, ¿qué impacto tendría una aparición como esa en los medios y en la sociedad? ¿sería bueno o malo para la tauromaquia? No sé la razón de ese afán de no salir en la televisión. No lo entiendo.

Acerquemos la tauromaquia a la sociedad. No es bueno que sólo salga José Tomás en la TV cuando le pegan los toros. ¿Qué hay de la grandeza del toreo? No nos escondamos. Perdamos los complejos. Hablemos de toros. Salgamos en los medios.